Una pequeña cantidad de sangre en tu moco cervical puede ser inofensiva; puede haber sido causada por fluctuaciones hormonales, o incluso por la implantación de un embrión, si has concebido. Pero, a veces, puede indicar pólipos cervicales o uterinos o fibromas. Hay también ciertos cánceres del aparato reproductor que pueden afectar los patrones de moco cervical y el ciclo menstrual. Es importante que hables con tu médico sobre cualquier goteo o sangrado en el moco que represente un cambio de tu patrón usual, o sobre cambios en tu flujo menstrual normal.
Cáncer de cuello uterino
Un sangrado anormal y un flujo vaginal poco común pueden ser síntomas de cáncer cervical. En la sección Estudio de casos encontrarás el de una mujer que concurrió a su médico para consultar sobre un patrón anormal de moco cervical y a la que se le diagnosticó cáncer de cérvix. Debido a que el tratamiento comenzó en una etapa temprana, se logró un gran resultado.
Cáncer ovárico y uterino
Un síntoma del cáncer de útero es un flujo vaginal anormal que es diferente del moco cervical típico. Los síntomas del cáncer ovárico y uterino pueden consistir en menstruación irregular, demorada o prolongada, o bien en sangrados intermenstruales o después de la menopausia. Otros síntomas son dolor en la parte inferior de la espalda o dolor pélvico, problemas digestivos, sensación de estar llena y constipación. Las mujeres con cáncer ovárico pueden experimentar también presión abdominal e hinchazón y aumento de peso.
Es importante recordar que muchos de estos síntomas pueden ser signos de afecciones menos serias. Visita a tu médico y hazte ver. ¡La detección precoz puede hacer la diferencia!